A fuego lento
Por Enrique Pastor Cruz Carranza
No habían pasado ni 72 horas de la toma de posesión de Enrique Peña Nieto, con algunas protestas en la Ciudad de México -de los hoy desaparecidos grupos anarquistas, casi “Ninjas Región Cuarta Made In Ebrard-, cuando, en el simbólico Castillo de Chapultepec, se signaba el “Pacto Por México”, con el objetivo de aglutinar a las fuerzas políticas suficientes para concretar las postergadas Reformas Estructurales.
Reforma que tanto cartel y dominio político le dieron, en tres sexenios y medio, a la nomenclatura cacique del PRIAN-PRD, concretada desde la época de Ernesto Zedillo, y capitalizada magníficamente por el dúo dinámico Manlio Fabio-Gamboa Patrón, mediante el control total del Poder Legislativo y la estructuración de cacicazgos en los Estados controlados bajo la misma tesitura.
Indiscutiblemente, se venía por todas las Reformas, así se tuviera que comprar conciencias en el mercado de hipocresía y alta cultura apátrida, lo cual se logra, sin importar ceder casi a la mitad del sexenio, a todas las presiones y alardes de gobernadores ejemplares del nuevo PRI, como Javier Duarte de Ochoa y Roberto Borge, por citar los emblemáticos en la actualidad.
Gustavo Madero Muñoz, del PAN; Cristina Diaz, encargada del PRI, y Jesús Zambrano, del PRD, aparecieron en la foto, mientras el Partido Verde Ecologista de México se alineaba el 28 de enero del 2013.
Fue vital la operación fina, como resistente de todos los embates, en la Vieja Casona de Bucareli, de Miguel Ángel Osorio Chong, solventando todos los caprichos de poderes facticos; la descocada idea de Felipe Calderón de retornar a “Los Pinos”, vía Margarita Zavala; el intento de seguir cogobernando de Manlio Fabio y Emilio Gamboa, con sus poderes facticos, que durante la etapa más critica de fin de campaña y elecciones, por conducto de Denise Maerker, usaron el caso del mentor Agustín Estrada -en cadena nacional- para poner en entredicho vulgar al aspirante mexiquense.
Fue una ruta de acuerdos con resultados fuera de discusión y cuidando no crear focos de alarma a los señores feudales convertidos en CONAGO. El proyecto involutivo para cumplir al Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional y bloque geopolítico hemisférico se cumple.
La batalla después de un Manlio desafiante frente al PRI, caído en total desgracia como factor de gobernabilidad y el inesperado triunfo de Donald Trump en los Estados Unidos, rompió la maqueta arquitectónica diseñada en el despacho de la demócrata Hillary Clinton y aliados aztecas.
Luis Videgaray, defenestrado y sepultado después de invitar al republicano Trump, es resucitado al triunfo del mismo, por la gracia del poderoso yerno del mandatario norteamericano; se adelanta en la sucesión, triangulando amarres desde Casa Campeche con el poderío de la Corona Española, representado por el Clan Mouriño que juega con todos, pero no descarta a nadie, para recuperar privilegios DENTRO DEL BOTÍN PETROLERO.
Por conducto de Layda Sansores y el pragmático Porfirio Muñoz Ledo se pacta con el afortunado Andrés Manuel López Obrador, leal contrapeso creado por Ernesto Zedillo en su pugna CONTRA Carlos Salinas, pero mejor histrión cardíaco en la simulación de la defensa del patrimonio petrolero, premiado con su MORENA, para disfrutar -sin sobresaltos- de prerrogativas de esas instituciones que había mandado al diablo y de los privilegios de formar parte de la generosa “Mafia del Poder”, ante la envidia de Cuauhtémoc Cárdenas.
Hoy se juega la Presidencia de nuestro país, y todos podrían pensar se trata de una nueva partida.
Ricardo Anaya Cortés es el candidato natural de la COALICIÓN POR MÉXICO AL FRENTE, formada por el PAN, PRD y MOVIMIENTO CIUDADANO, DEJANDO EN EL CAMINO CON GRAN DISCIPLINA -DIGNA DE LAS VIEJAS REGLAS DEL OTRORA PODEROSO PRI– AL TODAVIA JEFE DE GOBIERNO DE LA CIUDAD DE MÉXICO, MIGUEL MANCERA, Y DENTRO DEL PAN, AL EX GOBERNADOR GENIAL TRASFORMADOR DE PUEBLA, RAFAEL MORENO VALLE.
En las filas del PRI, dominado por Luis Videgaray y su proyecto personal, después del triunfo de Trump, Enrique Ochoa Reza INSTALADO COMO “LIDER”, maniobra las modificaciones de estatutos y abre las puertas a un José Antonio Meade Kuribreña que no quiere ver manchadas sus plumas de presunta integridad ciudadana, desechando toda posibilidad de filiación, exigiendo -en cambio- disciplina, trabajo y el uso de toda la maquinaria tricolor dispuesta a su fin, haciendo una excepción al peso del desprestigio y lastre del Dinosaurio que con todo y sus 89 años, ha caído en la indignidad.
Muchos militantes ante estas actitudes se preguntan: “¿SI TANTO ES SU PRESTIGIO, PULCRITUD, PROBIDAD Y GRANDEZA, POR QUÉ NO SE FUE COMO CANDIDATO INDEPENDIENTE?”
En MORENA no existe ningún problema para AMLO, más que el mismo AMLO. Su función de eficiente “AUTOCLAVE DE PURIFICACIÓN POLITICA” deberá traer grandes dividendos a la hora de convertir votos en porcentajes de prerrogativas y puntos finales, con picardía tropical, al ritmo cadencioso y singular del capitalino de hijos tabasqueños: Francisco José Hernández Mandujano… “Chico Che“.
Los “NENES y las NENAS” YA ESTARÁN DISFRUTANDO SUS PLURINOMINALES .
Lo peor está por venir en los siguientes días de campaña y la esperada felicitación anticipada al virtual ganador en demoledora Cadena Nacional.
VP/Opinión/JSC