Voces del Periodista Diario

Pemex, una institución que recibirá el afecto público

Por Gastón Pardo

Las palabras del presidente Andrés Manuel López Portillo con las que prometió que las etnias totonaca y tenek, presentes en las huastecas, también merecen con las sesenta que sufren la afrenta oficial en todo el país, todo el respeto asus usos y costumbres y a sus lugares sagrados. Es decir, siempre hubo lugares intocables e inalterables en la geografía indígena que padecieron el ataque infernal de la empresa Pemex en la etapa que México fue gobernado por el PRI y el PAN.

Antecedente
La expropiación petrolera decidida por el presidente Lázaro Cárdenas en 1938 puso en manos de la CTM dirigida por Vicente Lombardo Toledano, la tarea de escoger el modelo que en lugar de optar por el modelo de uso del subsuelo de acuerdo a la Common Law de los países anglosajones, consistente en permitir que un particular propietario de un terreno pueda explotar su subsuelo o rentarlo a una empresa.  El dirigente de la CTM, Lombardo, optó por el modelo imperial español consistente en conectar los bienes del subsuelo a la soberanía cuya cabeza era el monarca.
Pero como Lombardo era republicano, inventó y aplicó la fórmula de que siendo la nación soberana (lo cual es falso desde el punto de vista de la doctrina jurídica española, pues la soberanía la ejerce, protege y representa un funcionario o una institución que son mencionados en la ley suprema), la empresa petrolera que la ley creara actuaría en defensa de esa soberanía tutelando y administrando los bienes como la minería y el petróleo, en beneficio de la nación. La nación sustituyó, pues, al monarca como titular de los bienes del subsuelo, pero el modelo imperial de los bienes de ese subsuelo se mantuvo en beneficio, realmente, de la burocracia parasitaria.
Hay una teoría en derecho civil que se llama teoría del patrimonio de afectación, bien conocida por el funcionario que se encarga en las Huastecas de reparar con mucho tacto los daños que produce en el suelo y el subsuelo la contaminación por los hidrocarburos. Ese funcionario asimismo sabe que no hay un rincón en el estado de Veracruz que no haya sido contaminado por Pemex con su deficiente equipo extractor y por el crudo que transita por sus ductos, al que no le faltan vías de fuga de crudo.
Pero en el caso de daños y perjuicios, la teoría de afectación le permite catalogar a todo el territorio huasteco en un conjunto de bienes dispuestos en favor del uso abusivo, pues todo el territorio de las huastecas es de facto patrimonio de afectación porque su subsuelo contuvo por muchos años gran cantidad de crudo y gas a tres mil metros de profundidad, y cuando se permita al explotación de crudo como en Chiapas a 6 mil metros, se encontrarán con la auténtica Faja de Oro. Esta fue casi un mito compartido por las autoridades civiles y la gente. A los funcionarios de Pemex  los territorios sagrados les han valido sombrilla .
 
La carretera de la colonia Kawatzin de Coatzintla a la ruta al sur del Estado de Veracruz es el vivo ejemplo del abuso
Entre 2007 y 2008 salía a diario de la oficina de “relaciones externas” de Pemex Poza Rica una ingeniera con instrucciones precisas de abrir el paso a la construcción de la carretera de Kawatzin. A toda costa y sin ninguna consideración y utilizando el vocabulario más soez y la amenaza cruda y nítida, cumplio su cometido. Todos los ciudadanos que tenían su casa a la mitad de la calle en la última etapa de la construcción de la carretera, fueron sometidos por las leperadas de esa profesional, a la que no mencionamos por su nombre por respeto a que ha fallecido, a la vez que lamentamos no haber recibido su testimonio histórico.
Pemex penetró de la mano de la empresa privada que construyó la carretera denominada Ppemes, propiedad de dos hermanos: uno era el alcalde de Poza Rica y el otro tenía la meno metida en Pemex. No pidieron permiso a nadie para ingresar en ninguno de los terrenos afectados. La parcela 57 fue la más afectada porque anularon una ganadería que se estableció en el rancho en 2003. En 2008 cuando terminó la construcción de la carretera y de acuerdo con las pruebas aportadas a los abogados, la ganadería estaba en su apogeo. Pero le cayó encima la maldición gitana de Pemex.
Pemex intensificó en los dos pozos que instaló en la parte norte de la parcela 57 su actividad extractora y destructora pues saliendo de los límites que le fijan uno de esos “contratos de uso superficial” que les permiten ejercer el dominio absoluto sin autorización de nadie. Esos contratos abusivos ya han empezado a ser analizados con cautela por las barras y asociaciones de abogados y ya comienzan a recibir el repudio del poder judicial federal.
En la parte superior del terreno en su lado norte Pemex sin permiso de nadie eliminó una pendiente por donde los trabajadores ganaderos bajaban y subían con facilidad. Pues los altaneros de Pemex eliminaron la pendiente  y el relieve topográfico propio del terreno y dejaron un talud de 90 grados expuesto, sin ninguna señalización ni protección civil o pecuaria, desde la parte alta del terreno  a modo de vacío hacia las instalaciones  (ductos) de Pemex.
Por último, Pemex ha derramado crudo e inmundicias de su tubería en más de 10 hectáreas del terreno aludido produciendo daños de varios millones de pesos. En esta materia el doctor Peter Rothschild, experto en medicina celular y rector de la Universidad ortodoxa en Puerto Rico, examinó clinicamente en Papantla a pacientes de San Fernando hasta Martínez de la Torre, y les encontró estados precancerosos y cáncer. Este es el resultado de la contaminación por el crudo derramado pero tambén por otros derrames tóxicos.

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