Voces del Periodista Diario

Messi logra su gol 500 con el Barcelona; va directo al Pichichi

No pudo elegir un mejor escenario y un mejor rival para escribir otro capítulo en su historia. Lionel Messi marcó su gol 500 con la camiseta del Barcelona. El argentino, a pase de Neymar, agigantó su leyenda en el Sánchez Pizjuán al anotar en el minuto 43 el empate (1-1) para los azulgrana ante el Sevilla, que terminó 2-1 a favor de los blaugrana.
En total son 500 los tantos en 592 compromisos: 469 en 545 oficiales y 31 en 47 amistosos.
Además, Messi, con un preciso toque con el pie izquierdo, ha ampliado su cuenta goleadora ante el Sevilla. Son ya 27 las dianas que ha endosado al club hispalse, la mayor víctima de su carrera.
Por si fuera poco, Leo se ha quedado solo al frente del Pichichi con ocho tantos por delante de Luis Suárez (7). También es el máximo artillero de la Champions con siete goles y de todo el mundo en 2016 con 51 superando a Luis Suárez (46) y Cristiano Ronaldo (44).
El Barcelona se redimió de su derrota en la Liga de Campeones contra el City con una gran reacción en el segundo tiempo y asaltó el fortín del Sánchez Pizjuán, llevado por un gran Messi.
Sevilla fue muy superior en la primera mitad y se adelantó con un tanto de Vitolo en el primer cuarto de hora, pero Messi empató poco antes del descanso con su gol número 27 a los sevillistas, y en el segundo periodo Luis Suárez amarró el triunfo con el 2-1 para los barcelonistas, que incluso pudieron golear.
Con el Barcelona segundo y el Sevilla tercero a un solo punto, ambos llegaban a la cita con bajas, sobre todo los azulgrana y en especial en su defensa, al estar Mathieu, Piqué, Jordi Alba y Aleix Vidal lesionados, además de Iniesta. Al equipo andaluz le faltaban atrás los argentinos Nico Pareja, por lesión, y Mercado, sancionado.
El conjunto entrenado por el argentino Jorge Sampaoli salió con muchísima intensidad, con ambición y con una presión asfixiante que ahogó al Barcelona, que sufrió en demasía al no hallar el rumbo y pasó muchos problemas.
Tras un tiro cruzado del uruguayo Luis Suárez, que despejó Sergio Rico a los 2 minutos, los locales tuvieron dos buenas ocasiones, pero ni Escudero, el nuevo internacional tras ser llamado por Julen Lopetegui, ni Vitolo atinaron, lo que dio paso a otra nítida opción, ahora en el área local, que desperdició el brasileño Neymar.
En el contraataque posterior, el que sí aprovechó la oportunidad de abrir el marcador fue el canario Vitolo, que, tras un pase de Sarabia, se fue por velocidad de Sergi Roberto e hizo el 1-0 al batir por bajo a Ter Stegen en el primer cuarto de hora de partido.
No aparecía Suárez, no se veía a Rakitic ni a Denis, tampoco a Messi y a ratos solamente a Neymar…Después el futbol asistió a la exhibición de su mejor representante, Messi, luego de que el brasileño, por fin, pudo llevar a cabo un contragolpe; acertó a ver la llegada de Leo, quien ajustó su zurdazo raso al poste. El 1-1 era un premio enorme para el Barça, que si quería ganar debía mejorarlo todo en la segunda parte.
En la segunda parte pudo marcar otra vez Messi, pero su remate a bocajarro lo despejó el portero sevillano.
Después el argentino estuvo a punto de lograr un gol de videoteca, regateando a tres rivales en medio metro cuadrado, pero su disparo se fue por encima del larguero.
Después el 10 argentino se inventó una jugada y descubrió un pase imposible para que Luis Suárez hiciera eso que tan bien sabe hacer: rematar de forma inapelable. Y así un drama se convirtió en una fiesta para el equipo de Luis Enrique. Messi, impresionante en la conducción, en el regate y en la asistencia al uruguayo, quien preciso su remate por abajo. Lo difícil estaba hecho, pero había que consolidarlo y el Sevilla todavía tenía fuerzas.
El gol certificó la resurrección del Barça y dio carta de naturaleza al giro argumental del partido: la primera parte, que había sido un monólogo del Sevilla, quedaba enterrada por el Barça, que jugó 45 minutos extraordinarios después del descanso.
El árbitro del partido, Santiago Jaime Latre, sacó de sus casillas a Messi en la segunda mitad de la contienda cuando el argentino perdió el zapato por una falta.
Messi cayó adelante del mediocampo tras un pisotón y el silbante lo estuvo apresurando para que se pusiera de inmediato el calzado, generando la molestia del “10” que tenía que amarrarse el botín. Eso, más decisiones que no le marcaban a favor al Barca provocó la airada protesta de un Messi totalmente enojado hasta el punto de estrellar su zapato contra el césped.
El argentino fue amonestado por esta acción e incluso se salvó de la roja.
Luis Suárez estuvo a punto de sentenciar el partido en el ecuador de la segunda parte, tras otra gran combinación con Messi, pero su balón se paseó por la línea de gol, puro suspense en un partido que pareció una superproducción de Hollywood.
El argentino apareció revolucionado y convirtió su actuación en una oda al futbol. Combinó, corrió, remató, defendió, presionó y asistió. Lo hizo todo. Jugó de Messi, de Xavi y de Iniesta. Y por más que colectivamente el Barça volviera a dar una imagen alejada de su propia personalidad, Leo le condujo, otra vez, a la victoria.

Articulos relacionados

Argentina, un caso de estudio

Voces Diario

Moscú desmiente conexión con Trump Jr. y abogada rusa

Redacción Voces del Periodista

Vacaciones en México con medio país prohibido por violencia

Editor Web