A FUEGO LENTO
Enrique Pastor Cruz Carranza
(Exclusivo para “Voces del Periodista”)
“Los grandes egoístas son el plantel de los grandes malvados”
Madame de Sévigné
DESDE EL ANUNCIOdel proyecto de la refinería “Dos Bocas” en el Estado de Tabasco y la construcción del “Tren Maya”, que integrara a cinco estados del sur-sureste de nuestra nación, son muchas las ambiciones, mezquindades, y bajas pasiones, desesperadas por buscar ser parte de una tajada del proyecto y de quienes tenían información privilegiada, gracias al tráfico de influencias, por ser parte de la mafia del poder neoliberal —con los ajustes de rutas, lejos de sus terrenos adquiridos con alta visión de convertirlos en mega negocios, incorporaciones de entidades no consideradas como Chiapas, Tabasco, Campeche, Quintana Roo y Yucatán, están fallando.
Cual plaga
La claridad para llevarlas a cabo de inmediato sin sesgos cupulares, ni como endoso a los cuates globales doctorados en “moches” surgen —cual plaga de mosquitos en temporada de lluvia—, todo un catálogo de personajes del solar o del exterior convertidos en expertos, científicos, o iluminados, quienes se desgarran las vestiduras impactados por el daño que una refinería en Dos Bocas podría causar al cambio climático, el gran riesgo que correrán en las selvas por donde correrían las faltantes estructuras férreas del proyecto ferroviario de todas las secuelas, destrucción ecológica, efectos directos, indirectos y convexos de estas obras de integración
Las descalificaciones se han convertido en una constante, para desacreditar estos proyectos directamente vinculados a la integración al desarrollo postergado en estas zonas de la República, siempre marginada, saqueada de sus recursos naturales y relegada en toda posibilidad de crear corredores industriales, como sucede en casi todo en norte o solamente en partes muy específicas como el potencial turístico de la “Riviera Maya” o dinámico desarrollo de sus industrias integradas del siempre añorante Yucatán, consentido de la federación para atenuar sus sueños separatistas.
Las voces que descalificaron con fiereza, augurando una protesta mundial contra los dos planes de colosal inversión y profunda justicia nacionalista, ahora piden ser escuchadas con cambio de estrategia, convencidos que Andrés Manuel López Obrador no cederá nunca a esas campañas de intimidación hemisférica y que la 4T no es una consigna demagógica de gobierno, sino la mística de transformar el servicio público, en vocación de servir con probidad a los mexicanos, desechando los quistes putrefactos de una inercia de corrupción, impunidad, cinismo, desfachatez que, se ahogó entre treinta millones de sufragios, convencidos y profundamente democráticos.
Las acciones —evidentemente concertadas—, ante la convicción de rescatar Pemex y darle toda la viabilidad a la refinería Dos Bocas, lanzaron la degradación de una cosa llamada Fich Ratings que pretendía poner de rodillas al gobierno mexicano y crear una supuesta reacción de desconfianza a los inversionistas no de extremo especulativos.
Renegociación
El efecto rebote fue tan dramático como demoledor para los agoreros del fracaso sentenciado, cuando en la conferencia mañanera tradicional, el presidente anunció la renegociación de una parte de la deuda de Pemex con tres instituciones financieras internacionales.
HSBC, J. P. Morgan y Mizuho Securities firmarían un acuerdo, por tres años que se amplía por cinco años de un fondo de ocho mil millones de dólares.
Los datos arrollan todos los vaticinios, convertidos en polvo, ante los hechos consumados.
Quizás por ello, el singular “ángel” líder del neoliberalismo al frente de la no menos peculiar Organización para la Cooperación de Desarrollo Económico (OCDE), matiza sus dichos pues está consciente; el Ejecutivo Federal no cede a los chantajes, extorsiones o truculencias del colonialismo sin fronteras y Ángel Gurria Ordoñez al declarar: “Es tiempo de convertir los planes en normas y tomar decisiones de inversión en infraestructura que sean congruentes con un futuro sustentable”.
Cambio de juego
Los salteadores sin escrúpulos ahora juegan sus cartas con otra estrategia sin resignarse a quedar fuera de los presupuestos de la refinería con un promedio de ocho mil millones de dólares, ante la actitud de no mostrar debilidad en las convocatorias de constructoras de refinerías, quienes pensaron podrían jugar a los indispensables, desconocedores de nuestra grandeza como patriotas y quedó demostrado posterior a la nacionalización de 1938 por Lázaro Cárdenas del Río.
Ya la Secretaría de Energía por conducto de Rocío Nahle anuncia tener los Estudios de Impacto Ambiental y la obra dejara de ser una falacia, como sucediera con la fraudulenta “Bicentenario” en Hidalgo, de Felipe Calderón y pandilla del PRIAN – ESGES – Nomenclatura.
Para estos “expertos” contra la construcción de una procesadora de petróleo, la notica será formar parte de las casi 680 refinerías que existen en el mundo, en donde sus profecías quedan sepultadas ante la más grande del mundo —Jamnagar— en La India que procesa 1.2 millones de barriles diarios de derivados, se construyó en tres años, ocupa un área de 30 millones de metros cuadrados y la India no tiene ningún pozo petrolero. Por cierto, ni la calificadora Moodys ni los ecologistas globales se desgarraron las vestiduras por ello.
Las razones de rectificar posturas radicales, sin descartar actos deleznables a mediano plazo, también mira enjugándose los colmillos, al Tren Maya.
Son 1500 kilómetros de trayecto con una inversión de 120.000 y 150.000 mil millones de pesos según cálculos del propio AMLO.
Advertencias
En acción están lo mismo, cantantes de moda, el propio Gurria y unos presuntos 100 miembros de la comunidad académica y presuntos científicos de Yucatán, quienes el 19 de diciembre enviaron una misiva al presidente advirtiendo: “…no se puede emprender un proyecto de esta naturaleza sin un estudio previo, amplio y exhaustivo de sus impactos ecológicos, económicos, sociales y culturales en el corto, mediano y largo plazo”.
¿Dónde estaban estos “científicos notables yucatecos” cuando se depredaban miles de hectáreas para Dragon Mart; contra la siembra de transgénicos y uso de pesticidas que están acabando los apiarios en la península; cuando el derrame del Ixtoc, donde se vertieron cancerígenos como el Corexit que, cambió radicalmente todo el entorno ecológico de las costas de Campeche o la devastación actual de mangle, arena, tala de maderas preciosas y selva por parte de los menonitas en la empresa de carbón vegetal, por citar tantas omisiones y silencio mezquino?
La realidad es; pretender asaltar las obras y en el intento de justificar aquellos “moches” las tentativas de doblegar al tabasqueño y su indomable visión de gobernar, los trae ideando cuentos chinos y a los ex presidentes más corruptos de la historia moderna de esta nación, uniéndose en siniestras perversidades.