PERÚ, (Sputnik), 16 de noviembre de 2020 .- El fin de semana, las movilizaciones en la ciudad de Lima dejaron dos jóvenes fallecidos por heridas de armas de fuego, y el Ministerio de Salud de Perú reportó al menos 94 heridos, entre ellos periodistas que cubrían las manifestaciones.
“Amnistía Internacional pudo verificar que agentes policiales dispararon municiones, lanzaron gas lacrimógeno, golpearon o sometieron con violencia a personas de manera innecesaria y desproporcional, hiriéndolas y violando estándares internacionales de derechos humanos”, afirmó la organización en un comunicado.
Además, la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos de Perú informó más de 40 personas desaparecidas.
Amnistía Internacional recibió también denuncias de detenciones arbitrarias por parte de efectivos de la Policía Nacional vestidos de civil y que se negaban a identificarse, y de malos tratos por parte de las fuerzas de seguridad.
Por su parte, la Policía Nacional reportó que más de diez efectivos policiales resultaron lesionados con objetos contundentes, e informó sobre personas que fueron detenidas por “disturbios, agresión y resistencia a la autoridad”, pero omitió publicar la cifra exacta.
La organización demandó una “investigación exhaustiva, imparcial y oportuna” para que los responsables sean llevados a la justicia.
“Asimismo, demanda el cese de la represión contra las movilizaciones ciudadanas, recordando el derecho de las personas a la protesta pacífica”, agregó.
La asunción del nuevo Gobierno despertó múltiples protestas en Perú, dado que la ciudadanía considera que lo hecho por el Congreso responde a una maniobra en favor de intereses particulares y a un intento por perpetuarse en el poder.
El domingo, Merino presentó su renuncia, la cual había sido exigida luego de los hechos de violencia registrados durante las protestas ciudadanas en su contra y la muerte de los dos jóvenes.
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