CIUDAD DE MÉXICO, 27 de marzo de 2018.- El director de Red Voltaire, Thierry Meyssan, asegura que la Corona británica pretende recuperar su hegemonía global tras el fracaso del proyecto estadounidense de mundo unipolar y que uno de los requisitos para lograrlo es la anulación del poderío militar de Rusia.
En su más reciente artículo, publicado este martes, con el título de “La política exterior de Theresa May”, el periodista e investigador francés explica que el 13 de noviembre de 2017, la Primera Ministra del Reino Unido esbozó públicamente la nueva estrategia británica, después del Brexit.
El Reino Unido pretende restaurar su Imperio (Global Britain) promoviendo el libre intercambio mundial –con ayuda de China– y apartando a Rusia de las instancias internacionales –con ayuda de sus aliados en el ámbito militar, o sea de Estados Unidos, Francia, Alemania, Jordania y Arabia Saudita-.
Según él, la nueva estrategia global de Londres tiene como punto de partida la denuncia hecha por el presidente ruso, Vladimir Putin, en 2007, en el marco de la Conferencia de Seguridad de Munich, en el sentido de que el proyecto unipolar de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) es antidemocrático.
Tal planteamiento causó disgusto en la City. Meyssan explica por qué:
El objetivo de la organización social en el Reino Unido es la acumulación de bienes mientras que en Rusia es la construcción de la personalidad individual de cada persona. Es por eso que en el Reino Unido la propiedad inmobiliaria se concentra masivamente en cierto número de manos, al contrario de lo que sucede en Rusia y sobre todo en Francia. Es casi imposible comprar un apartamento en Londres, lo más que puede lograrse –como en Dubai– es suscribir un contrato de arrendamiento por 99 años. Desde hace siglos, casi toda la ciudad pertenece a 4 personas. Un británico decide libremente a quién deja su herencia, y no tiene (que) ser necesariamente a sus hijos. Por el contrario, cuando un ruso muere, la historia vuelve a comenzar desde cero: sus bienes se reparten a partes iguales entre todos sus hijos, independientemente de la voluntad del difunto.
Meyssan agrega que el 22 de enero de 2018, el jefe del Estado Mayor de su Majestad, general Nick Carter, dedicó un importante discurso a la próxima guerra contra Rusia.
Teniendo en cuenta lo que Rusia ha mostrado en Siria, el general británico Nick Carter afirmaba que es necesario disponer de más tropas terrestres, desarrollar el arsenal británico y prepararse para una guerra donde la imagen que ofrezcan los medios de difusión será más importante que las victorias obtenidas en el terreno.
Al día siguiente de esta trascendental conferencia en el Royal United Services Institute (el think tank del ministerio de Defensa británico), el Consejo de Seguridad Nacional del Reino Unido anunciaba la creación de una unidad militar consagrada a la lucha contra «la propaganda rusa».
El artículo de Meyssan salió a la luz horas después de que 26 países anunciaran la expulsión en masa de diplomáticos rusos, por el caso Skripal.
A la hora de redactar el presente material, el mundo ha sido informado de que la OTAN, por su parte, expulsó a siete integrantes de la misión rusa. (El 4 de marzo pasado, el ex espía ruso Sergéi Skripal y su hija Yulia, fueron envenenados con un agente neurotóxico que fue inventado en Rusia. El incidente ocurrió en la ciudad británica de Salisbury. El gobierno británico acusó al gobierno ruso del atentado. El Kremlin, por su parte, negó cualquier participación y dio a entender que Londres pudo haber llevado a cabo el ataque.)
La Primera Ministra británica, Theresa May, viajó a China, 9 días después del discurso del general Nick Carter. Aterrizó en ese país el 31 de enero pasado y, en efecto, logró diversos acuerdos comerciales con Pekín, pero fracasó en el propósito de enemistar al régimen chino con el gobierno ruso. Tampoco consiguió que China le cediera el control de la nueva ruta de la seda.
Ante el doble fracaso, Londres reafirmó su alianza tradicional con Estados Unidos. Therry Meyssan lo explica de la siguiente manera:
Después de la estancia de la señora May en Pekín, la Corona activó el gobierno de su “dominion” australiano para poner nuevamente en marcha los Quads, el grupo anti-chino que antes se reunía bajo el mandato de George Bush hijo. Además, de Australia, son miembros de ese grupo Japón, la India y Estados Unidos.
Ya en este momento, el Pentágono estudia las posibilidades de provocar desórdenes tanto en el trazado terrestre de la ruta de la seda como en el camino de su versión marítima, a través del Pacífico.
El texto completo de “La política exterior de Theresa May” se puede leer de manera gratuita, en la siguiente dirección electrónica: http://www.voltairenet.org/article200356.html.
VP/Internacional/JSC