A pesar de las restricciones impuestas para contener la pandemia de coronavirus, un grupo de hombres ricos y mujeres que les acompañaban viajaron en un avión privado desde el Reino Unido a Francia para pasar tiempo en una villa de Cannes, pero tuvo que dar la vuelta, cuando la Policía le prohibió desembarcar.
El Daily Mail informó este viernes que 7 hombres, de entre 40 y 50 años, y 3 mujeres, de entre 24 y 27, llegaron al Aeropuerto de Marsella Provenza el pasado 4 de abril. El viaje fue organizado por un empresario croata que trabaja en el ámbito de las finanzas y bienes raíces en el Reino Unido y alquiló 3 helicópteros que debían trasladar a todo el grupo a la mansión. Estaba “esperando con interés el descanso con sus amigos y la compañía de mujeres jóvenes”, señaló una fuente policial.
La Policía del aeropuerto solicitó al grupo que no aterrizara, pero aun así lo hicieron.
“Tengo el dinero, vamos a hablar”, afirmó el organizador del viaje durante su conversación con los uniformados, según la fuente. “Dijo que todos ellos van a la villa y se encerrarían allí y que no habría problema”, indicó, agregando que “obviamente fue un viaje de recreo y bajo las medidas de contención está terminantemente prohibido”.
“Quizás pensaron que recibirían una multa, pero podrían llegar a su destino”, afirmó un agente, citado por Bloomberg. “Pero no resultó de esta manera”, afirmó.
Tras el incidente, a los tres pilotos de los helicópteros se les impusieron multas por la violación de las restricciones por la pandemia, mientras que los viajeros no fueron sancionados, ya que se quedaron en su avión durante la conversación con la Policía y técnicamente no entraron en territorio francés.
“Nadie tenía razones válidas para el viaje“, afirmó la fuente. Al no recibir permiso para bajar del avión, tuvieron que regresar a Londres, mientras que un miembro del grupo se dirigió a Berlín.
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