Los federales, que detuvieron a por lo menos seis maestros en este Municipio, cumplieron dos horas y media retenidos a punta de machete.
El grupo federal de apoyo que acudió a la Colonia El Tepeyac a su rescate permanece encapsulado en otra zona por integrantes del Movimiento Popular Guerrerense y vecinos.
El diálogo entre colonos y los mandos federales ha sido infructuosos.
“Se van ustedes, y sus compañeros (federales) no salen de esta colonia hasta que regresen a los detenidos”, dijo Juan Salmerón, vocero de los colonos.
“No está en mis manos liberarlos, estoy teniendo comunicación con (la Secretaría de) Gobernación, dejen libres a los elementos y les doy mi palabra que todo va a salir bien, se los vamos a entregar”, ofreció un mando.
La turba se fue contra los federales a gritos y empujones.
“Ni madres, de aquí se los llevaron y aquí los traen, o les partimos la madre, ya estuvo suave de sus abusos”, gritó una vecina.
“A ver, contrólalos, te estoy ofreciendo un trato y no lo estás tomando en cuenta”, sentenció el portavoz a un mando.
El diálogo se dio entre empujones y los vecinos replegaron paso a paso a los federales que intentaron el rescate de sus compañeros, que calculan en unos 20.
El grupo antimotín replegado, unos 200 elementos, se mantiene en una zona alejada de sus compañeros, sin agua ni alimentos.
Vecinos ordenaron a las tiendas no venderles agua ni comida.
El audio de la iglesia llamó a las colonias aledañas a apoyar a los vecinos contra los federales.
También con las campanas se alertó a la población a salir de sus casas.
La negociación se encuentra atorada debido a que los detenidos fueron presuntamente llevados a Acapulco.
Encapuchados llevaron gasolina en botes para prender fuego a los federales.
“Los vamos a quemar, cabrones; o nos dan a los detenidos o los vamos a quemar, no es una broma”, gritó un esbozado.
Con información de Reforma