México, 5 Oct. (Notimex).- Activistas y militantes de Greenpeace y de Amnistía Internacional (AI) se manifestaron frente a la embajada de Rusia en México, para pedir la liberación de 30 personas detenidas por el gobierno ruso cuando pretendían hacer una protesta pacífica en los mares del Ártico.
Los ciudadanos que apoyan a los 28 ecologistas y dos periodistas detenidos, rodearon la sede diplomática formando una cadena humana tomados de una cuerda, y mostrando fotografías de quienes han sido acusados de piratería por parte del gobierno ruso.
La coordinadora de la Campaña de Energía y Cambio Climático de Greenpeace, Beatriz Olivera, dijo “mis colegas detenidos son personas valientes y determinadas, todos y todas están convencidos de defender el Ártico, y de proteger a las personas y animales que viven allí, uno de los lugares más frágiles del planeta”.
Manifestó que en el Ártico, aprovechando el deshielo, se pretende realizar una perforación para extraer petróleo, en la plataforma de Gazprom.
Ello, además de contribuir al calentamiento de la zona, afectaría a cuatro millones de habitantes de comunidades indígenas, así como a la conservación del oso polar, zorro, nadal y a la amapola polar, entre otras especies de fauna y flora de la región, subrayó.
Recordó que los detenidos eran tripulantes del barco Artic Sunrise, el cual pertenece a Greenpeace y que luchan porque el Alto Ártico sea declarado santuario global.
A esta protesta se sumó Amnistía Internacional, que consideró absurdos los cargos por piratería, y mencionó que son una clara represalia por sus legítimas actividades en defensa del medio ambiente.