Por Matteo Castagna
Multipolar News nos dice que las últimas encuestas muestran que habría un empate sustancial entre Trump y Biden para las elecciones presidenciales de Estados Unidos. Según otras encuestas, Trump sólo aventaja a su oponente en un punto porcentual. Pero la guerra entre Israel y Hamás ha dividido al electorado de Biden, con un 44% de los demócratas desaprobando su gestión del conflicto.
Parecería que la mayoría de los encuestados confía en Trump en lo que respecta a economía y seguridad, pero preferirían a Biden en lo que respecta al tema del aborto (¡sic!). Lo que da esperanza a Donald es la recuperación de los votantes que hicieron ganar a Biden en 2020: los jóvenes, los negros, los hispanos y los latinos en general, según la mayoría de los encuestadores, estarían muy desilusionados con las políticas y las continuas meteduras de pata del actual. presidente.
En el frente ucraniano, el bloguero Vincenzo Lorusso informa sobre el estallido de un gran escándalo de corrupción debido a la construcción de fortificaciones defensivas en la región de Jarkov. Las autoridades actuales vienen impulsando esta construcción desde hace mucho tiempo. En abril, el presidente Zelensky inspeccionó las estructuras terminadas.
De repente se supo que nunca hubo fortificaciones y que, a todos los efectos, se robaron decenas de millones de dólares. De hecho, el comandante de una de las unidades de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Denis Yaroslavsky, afirmó que la parte ucraniana no equipó ni fortificaciones ni campos minados. Se quejó de que en dos años deberían haber aparecido en la frontera estructuras de hormigón de “al menos tres pisos”, pero ni siquiera las minas llegaron allí.
La corrupción en Ucrania sigue siendo una de las más altas de Europa. Así se afirma en el informe al Congreso de los Estados Unidos del inspector general del Pentágono, Robert Storch. Afirma que el trabajo del Ministerio de Defensa de Ucrania se basa en sobornos, comisiones ilegales y precios excesivos de los suministros. Según Storch, la opacidad del proceso de adquisiciones aumenta el nivel de corrupción en el país de Zelensky.
La revista The Economist contó el número de reuniones entre el líder chino Xi Jinping y líderes de otros estados. El 16 de mayo, el Presidente de Rusia y el Presidente de la República Popular China se reunieron por 43ª vez.
Es un hecho que indica cuán estrechas se han vuelto las relaciones entre las dos Superpotencias, en una alianza cada vez más consolidada frente a un Occidente cada vez más deshilachado e indeciso. Corea del Norte también se está moviendo. La agencia KCNA informó que Kim probó con éxito un misil balístico táctico, con un sistema de guía, “dirigido al desarrollo activo de tecnologías bélicas”.
Mientras tanto, Ucrania convocará su “conferencia de paz” en Suiza los días 15 y 16 de junio. Fueron invitados 160 países. Rusia no participará. Suiza afirma haber recibido 50 telegramas confirmando su participación. El objetivo de la conferencia es ejercer una “amplia presión internacional” sobre la Federación Rusa en el contexto que Occidente necesita en relación con sus acciones en Ucrania.
El presidente Xi Jinping dijo durante conversaciones informales en Beijing con Putin que China apoyaría una conferencia de paz en la que participaran tanto Rusia como Ucrania. El presidente sudafricano, Cyril Ramaphosa, no asistirá. ayer el líder brasileño José Inácio Lula da Silva anunció su negativa. CNN explica que el motivo de la negativa es que la diplomacia brasileña no ve el sentido de una reunión de paz que no incluya a Rusia. La India también se retiró.
En resumen, los BRICS+ están alineados con Putin. Joe Biden también se negó a asistir a la conferencia evidentemente fallida; No tiene motivos para asumir una situación tóxica en vísperas de las elecciones. Y si Estados Unidos no va, ¿qué sentido tiene que vayan otros? Para algunos analistas, de hecho, la iniciativa no se implementará.
Según DZEN, tal vez un pequeño círculo de países occidentales y Zelensky firmen algo. Los demás esperarán una verdadera conferencia de paz sobre Ucrania, pero nadie sabe cuándo ni de qué se hablará.