Aunque Pese
Por Salvador Martínez García
Reanudamos nuestras habituales entregas de Aunque Pese, luego de una obligada suspensión de casi tres meses, forzada por fuerte afección de Covid-19 de la que afortunadamente logramos salir.
El tiempo nos permitió observar la mezquindad que priva en la sociedad, de la cual no es ajena, acaso su mejor reflejo, la política y los políticos. El contagio por coronavirus del presidente López Obrador dio lugar a innumerables memes y comentarios en la red que muestras la vileza de pensamiento y acción de no pocos.
Enviados y/o pagados por los políticos de oposición, por empresarios y organizaciones de hombres de negocios de ultraderecha, los memes con deseos hasta homicidas se hacían llegar a todas las redes sociales y a los chats de WhatsApp.
La prensa formal no se hizo eco de estas ruindades, aunque lo largo de los últimos dos años ha sido no sólo caja de resonancia de las quejas y críticas de quienes han perdido privilegios y grandes negocios derivados de la corrupción, sino hasta han dejado de ser medios para convertirse en protagonistas políticos.
El preámbulo a las campañas políticas de las elecciones más grandes de la historia, habla por sí solo de lo difícil que serán las contiendas en las que Morena, con Mario Delgado a la cabeza tiene la necesidad de mantener la mayoría en la Cámara Baja, para dar sano curso al proyecto de la 4T
Hoy la incertidumbre se hace presente ante el contagio presidencial que, de complicarse, no sólo pondría en riesgo la vida del Jefe de Gobierno, sino su proyecto de nación y hasta la estabilidad política del país.
De nuevo surgen las mezquindades de quienes apuestan a la tragedia o a la crisis como única forma de sacar ventajas, dada su incapacidad de motivar con ideas y razones sus posiciones políticas, que se reducen al denuesto en memes y mensajes en redes. Así las cosas.
SUSURROS
Nadie se escapa de los acechos del covid-19, ayer mismo resultó contagiado de SARS CoV-2 el hombre más rico del mundo, Carlos Slim Helú, hasta ahora sin mayores complicaciones.
Esto hace patente la urgencia de contar con el número suficiente de vacunas y su inmediata aplicación como único método visible, hasta el momento, de frenar la pandemia que en México ha cobra ya más de 150 mil muertos.
De ahí la importancia de la charla telefónica que este lunes sostuvieron el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y su contraparte mexicana, en la que se arrancó el compromiso de recibir 24 millones de vacunas Sputnik V en los próximos tres meses.
Habrá que esperar que también se cuente con las otras vacunas de Aztra-Seneca, Pfizer, Cansino, Moderna y cuantas más aparezcan en el mercado. La urgencia es mucha y la necesidad mayor.
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VP/OPINIÓN/Redacción.