ANKARA, (Sputnik), 10 de noviembre de 2020 .— El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, declaró por teléfono a su par ruso, Vladímir Putin, que Turquía y Rusia controlarán juntas el alto el fuego en Nagorno Karabaj, informó la Administración del líder turco.
“Erdogan declaró que Turquía realizará junto con Rusia el control y la supervisión del alto el fuego en la plataforma de un centro conjunto que se creará (…) en el territorio liberado de la ocupación armenia”, dice el comunicado.
Es necesario, indicó, “aprovechar esa oportunidad para establecer una paz justa y sostenible en la región”.
Erdogan destacó que se dio “un paso correcto” hacia la solución del conflicto en Nagorno Karabaj.
“La tregua en Nagorno Karabaj muestra la importancia de la cooperación entre Turquía y Rusia en la solución de las crisis y los conflictos regionales”, comentó Erdogan al señalar que se podría desarrollar una “colaboración similar al mecanismo de la resolución de la crisis siria”.
También afirmó que es importante que los azerbaiyanos regresen a Nagorno Karabaj y que se abra un corredor entre Azerbaiyán y su exclave, la República autónoma de Najicheván.
Pero lo más importante, según Erdogan, es “que Armenia cumpla con sus obligaciones establecidas por el acuerdo de tregua” y en ese contexto destacó que “Rusia tiene una gran responsabilidad”.
A su vez, el Kremlin informó que durante la conversación telefónica Erdogan “apreció los esfuerzos rusos en la mediación, que crean una buena base para encontrar una solución integral y duradera al conflicto en Nagorno Karabaj”.
Putin y Erdogan acordaron cooperar estrechamente en la implementación de las medidas establecidas en la declaración conjunta de Armenia, Rusia y Azerbaiyán.
En el marco del acuerdo, Rusia ya procedió al envío de fuerzas de paz —1.960 militares, 90 transportes blindados y 380 medios técnicos— que se desplegarán en la línea de separación entre las partes beligerantes y a lo largo del llamado corredor de Lachín, que conecta Nagorno Karabaj con Armenia.
Los bandos del conflicto deben permanecer en sus posiciones actuales, intercambiar prisioneros de guerra, otros detenidos y los cuerpos de los caídos.
Según la declaración, las fuerzas de paz rusas en Nagorno Karabaj se emplazarán por cinco años, con posibilidad de prórrogas automáticas por períodos similares, a menos que alguna de las partes firmantes notifique la intención de rescindir dicha cláusula con seis meses de antelación.