Voces del Periodista Diario

¿Palabra empeñada?

A Fuego Lento

Por Enrique Pastor Cruz Carranza

Desde su prolongada campaña en busca de la presidencia, el Lic. Andrés Manuel López Obrador se refirió a la descentralización de todas las oficinas de PEMEX a Ciudad del Carmen Campeche , como un acto elemental de justicia , al centro principal de actividad petrolera de todo México .

La presencia de la otrora empresa insigne de fortaleza y nacionalismo , pulverizada en las Reformas Energéticas ha sido y seguirá siendo por mucho tiempo , el principal activo en las finanzas y factor geopolítico dentro de las luchas globales en la materia .

Mienten y mintieron los que anunciaron la muerde de la gallina de los huevos de oro en el Oil nacional .

Su llegada al Carmen y activación se dio a mediados de los años 70s cuando los conflictos internacionales en el precio, llevó a los grandes consumidores a tratar de doblegar la política de la OPEP y revertir sus efectos.

Las reservas probadas -desde aquel informe entregado por Jesús Reyes Heroles al presidente Gustavo Díaz Ordaz en 1968 – salieron de los archivos resguardados en la estrategia de “Seguridad Nacional” para cumplir frenéticamente la misión de ser factor de revertir los precios , mediante producción y tráfico de crudo en los mercados negros de Ámsterdam ( huachicol ) .

En esos afanes , no se tuvo la mínima consideración de pulverizar a la industria pesquera camaronera , orgullosa de ocupar el primer lugar en producción sustentable y generar miles de empleos a los nativos insulares .

Se violentaron todas las normas internacionales al construir los gasoductos marinos y después del presunto accidente del IXTOC , la contaminación y crimen ecológico fue inmenso, como la indiferencia gubernamental en los tres cómplices niveles de gobierno .

Desde aquel patético anuncio de López Portillo para advertirnos : “ debíamos saber administrar la abundancia “ a la colosal rapiña de los excedentes con Vicente Fox y el espurio Felipe Calderón , esta actividad se convirtió en la Cueva de Ali Baba y más de 40 sexenales ladrones sin llenadera.

Factor de financiamiento de todas las campañas sin pudor y capacidad inmensa de corrupción en todos los sentidos .

Simulación , fraudes concertados, tráficos de influencia , negocio del servicio público mezclado con cinismo y rapiña sin precedentes.

Trato indigno en materia de participación fiscal , mientras los traidores gobernadores se llenaron de fortuna y riquezas faraónicas .

Promesas van y promesas se esfumaron en la demagogia .

Lo mismo con banderas tricolores del PRI .

Ni que decir en el asalto pactado durante el tongo del 2000 y el fraude vergonzoso del 2006 .

La Reforma Energética parecía ser el clavo final en el proceso regresivo para entregar nuestro petróleo a los corsarios sin fronteras .

El triunfo de AMLO significa – según las teorías esgrimidas – el fin de tráficos de influencias, contratos a los amigos , parientes o socios paisanos del Edén.

La promesa de terminar con la corrupción y recuperar PEMEX debe estar en proceso .

El compromiso del entonces candidato Andrés Manuel ante los campechanos del Carmen , fue traer todo PEMEX a la Isla ?.

Ya siendo Presidente Electo se ratificó el tema .

El Señor Presidente Constitucional dio instrucciones precisas al Director General Ing. Octavio Romero Oropeza a cumplir su palabra .

El pasado 8 de julio de este año , durante la conferencia mañanera en Palacio Nacional pregunté al Ejecutivo Federal cuando llegaría PEMEX al Carmen para cumplir con dignidad y gallardía su palabra .

El aseguró – y consta en video frente a la nación -qué PEMEX si va al Carmen .

No dio fecha y eso si preocupa .

Esperamos su colaborador quien despacha en la “Torre de Marina Nacional” no ponga en duda la probidad de su jefe y este compromiso se cumpla sin esperar tiempos politiqueros electorales .

Sería lamentable contaminar la 4T con jugarretas de esa índole .

Recordemos el pueblo no es tonto y menos para seguir caminando en la demagogia política cada seis años o para inducir preferencias partidistas .

¡Sería deleznable!

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